El spray para habitaciones mata al 85 % de los mosquitos con una cobertura de solo el 12 %

Un estudio realizado en un entorno seminatural descubrió que aplicar insecticida en la parte inferior de las paredes de una habitación mataría a la mayoría de los mosquitos, lo que sugiere una forma más económica y fácil de tratar los hogares durante un brote. El mosquito Aedes aegypti es un vector de enfermedades graves, como el dengue, el chikungunya y el zika. En Asia y América Latina, un método que se usa para controlar los mosquitos que se asientan dentro de las casas es la fumigación de interiores con efecto residual, en la que las paredes interiores se cubren con un insecticida persistente. Sin embargo, la gran superficie que debe cubrirse hace que este enfoque sea costoso de implementar. Luca Facinelli y sus colegas buscaron definir una «zona de muerte» más precisa para hacer que la fumigación residual en interiores sea más barata y fácil de hacer para los propietarios individuales. Los autores realizaron una serie de experimentos utilizando tiras adhesivas adheridas a paredes de diferentes alturas para explorar dónde eligen descansar los mosquitos. La mayoría de los mosquitos eligieron descansar cerca del suelo, y la mayoría de los insectos eligieron posarse en los primeros 20 cm de la pared, lo que corresponde al 12,3% de la superficie total de la pared. Cuanto más cálida es la habitación, más mosquitos tienden a descansar, y la parte inferior de la habitación suele estar más fresca. Rociar en esta área inferior puede matar a más del 85% de los mosquitos en la casa, estima el autor, especialmente si esta área es de color negro, ya que se sabe que el Aedes aegypti prefiere posarse en superficies oscuras. Los propietarios individuales pueden aplicar fácilmente una capa de insecticida o insecticida rociado con una lata de aerosol manual en esta área de fácil acceso, según los autores.