La tasa de inflación de España se mantiene estable, pero se espera que aumente aún más durante el invierno estallido

La inflación subyacente española continúa su tendencia a la baja

Según la estimación preliminar publicada esta mañana por el Departamento de Estadística de España, la inflación alcanzó en octubre el 3,5% como se esperaba, el mismo nivel que en septiembre. En términos mensuales, la inflación aumentó un 0,3% en octubre. Por un lado, los precios de la electricidad han ejercido una presión al alza sobre la cifra de inflación, cayendo este mes menos que hace un año. Por otro lado, los precios más bajos de los combustibles y el aumento más lento de los precios de los alimentos han presionado a la baja la tasa de inflación. La tasa de inflación armonizada aumentó ligeramente hasta el 3,7% en octubre desde el 3,5% del mes pasado.

La inflación subyacente, excluidos los alimentos y la energía, fue del 5,2%, muy por debajo del 5,8% de septiembre. Esta disminución indica que las presiones inflacionarias subyacentes en la economía continúan disminuyendo. La semana pasada también se reveló que la economía española se desaceleró significativamente en el tercer trimestre. Una mayor desaceleración del crecimiento económico ayudaría a que la inflación subyacente cayera aún más en los próximos meses.

Es probable que la inflación aumente aún más durante los meses de invierno

La pregunta ahora es qué traerá la inflación en los próximos meses y en el próximo año. Debido a las fuertes fluctuaciones recientes, los efectos fundamentales y los nuevos impulsos inflacionarios han tenido un impacto significativo en la evolución de la inflación. Esto se debe a que la evolución anual del IPC se ve afectada no sólo por la variación del índice de precios del mes en cuestión sino también por el punto de partida o valor base del año anterior. El siguiente gráfico muestra el cambio en la inflación general y lo divide entre este efecto base y el efecto de nuevos aumentos de precios. Los efectos de base favorables en el primer semestre de este año ayudaron a reducir drásticamente la inflación general. Desde principios del verano, hemos entrado en una nueva fase en la que los efectos fundamentales favorables tienen menos fuerza, lo que permite que la inflación general vuelva a aumentar.

Esperamos que la tasa de inflación general de España aumente aún más en los próximos meses. Los efectos de base al alza, el aumento de los precios de los combustibles y el fin de las medidas gubernamentales para mitigar el impacto de la crisis energética ejercerán una presión al alza sobre la inflación general. Por otro lado, una nueva desaceleración de la economía hará que la inflación subyacente continúe su tendencia a la baja. Este año, esperamos que la tasa de inflación promedio sea del 3,7%. Para 2024, asumimos una tasa de inflación promedio del 3,4%. El aumento de los precios del combustible debido a las tensiones actuales en Oriente Medio y otros efectos de segunda ronda plantean riesgos al alza para nuestras perspectivas.

Higo. Contribuyendo al cambio en la inflación

Fuente: INE, cálculos de ING.