Resuelve todas las dudas que tengas sobre si el CBD es legal en España

Recién la moda por el consumo de CBD se dispersa gracias a la enorme ganancia que adquirimos en el confort propio.

El contexto legal para este producto en España es un tanto difuso en vista al desconocimiento sobre este ingrediente, tanto a nivel jurídico como terapéutico o medicinal. O sea, un sinnúmero de estudios cada vez repite más cómo el CBD puede ayudar al ser humano a tener una mejor calidad de vida, pero debido a la procedencia del cannabidiol su tolerancia todavía cuelga de un hilo.

CBD vs. THC: Contrastes que hay que comprender

El THC sí puede hacerte dependiente y provocar efectos psicotrópicos. Esto significa que este principio opera en el sistema nervioso permutando la percepción, el humor, en el comportamiento o incluso pérdidas de memoria si su uso es persistente.

Sin embargo, se ha justificado que el CBD es un incentivo para rendimiento, no causa adicciones y no produce los efectos que de mencionar sobre el THC. Al contrario, nos hace sufrir menos, reduce la ansiedad, dormimos adecuadamente… En definitiva, vivimos en condiciones más confortables.

Cuál es la situación legal del CBD en España

Hace unos años, en España se podía adquirir el aceite de CBD en algunas tiendas como CBDax.es, pero la EFSA (Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria) decidió suspender su venta de aquellos productos etiquetados como suplementos alimentarios con CBD.

Por tanto, la AEMPS (Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios) no lo incluye en su lista de complementos alimenticios.

Por tanto, el dispendio de CBD no es ilegal, pero no se permite su despacho para consumición humana. En otras palabras, es posible comprar, pero vender.

Existe un pequeño vacío legal que, como su prohibición va exclusivamente dirigida a complementos alimentario, sí que existen cosméticos, es decir, cremas, que sí se permiten vender.

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En España y en muchos países del mundo se puede utilizar el cáñamo, de cuya planta se extra el cannabidiol, para fabricar cosméticos de uso externo. No es legal venderlo para consumo, pero sí para «uso externo». Todo muy lógico, ¿verdad?

¿Podemos esperar que sea legal el CBD en España en un futuro?

La ciencia avanza y las investigaciones cada vez respaldan más sus beneficios terapéuticos y medicinales. Aunque una gran parte de la población todavía no es muy proclive a ver con buenos ojos el consumo de esta elaboración por venir de una especie herbácea que también da otros compuestos que pueden ser perjudiciales para la salud, solo hace falta tiempo a fin de que, poco a poco, los avances médicos modifiquen esta aprehesión negativa y muchas más personas se permitan disfrutar mejor de su día a día. Al fin y al cabo, este es el objetivo de consumir de este ingrediente. Sus desventajas son muy escasas ya que los efectos secundarios que produce no son graves y se pueden solucionar fácilmente.

Aunque los ensayos clínicos que se han llevado a cabo arrojan luz sobre las propiedades terapéuticas del CBD, la carencia de legalidad en España lo echa para atrás.

Como venimos diciendo, el tiempo lo dirá todo y casi con convicción que en un futuro podremos disfrutar de sus enormes propiedades de manera legal en España y la mayoría de las naciones del planeta.

En ausencia de que la ONU apruebe este compuesto y lo excluya de la lista de drogas psicoanalépticas y tomar la delantera para aprobar sus características curativas, tendremos que seguir esperando sentados.

Recuerda que su compra no es ilegal, sí su venta. Por lo que, si deseas probar sus cualidades, podrás obtenerlo desde cualquier tienda online que pertenezca a una empresa internacional fuera de España donde sea legal su comercialización.

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Por ahora, esta es la única opción legal para poseer este principio procedente de la planta del cáñamo en un formato diferente al de cremas de cosméticos, como pueden ser los aceites, líquido para vapear, cristales o incluso cápsulas como refuerzo en la alimentación. La cuestión sobre si se puede cultivar en nuestras casas: no está castigado. Ahora bien, siempre que sea para un aprovechamiento privado. 

Todas estas opciones son fructíferas y auxilian a aquellos que desean recuperarse, que tengan músculos inflamados o síntomas provocados por medicamentos u otros tratamientos de diferente índole. 

Solo podemos esperar. 

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